El Ayuntamiento ha aprobado esta mañana, con amplio consenso y alguna sonrisa contenida, la creación de un nuevo puesto en el organigrama municipal: la Concejalía de Excusas.
Este puesto estará encaminado a explicar el motivo por el cual, a pesar de que ya no gobierne la oposición, la basura sigue sin recogerse puntualmente; el autobús se avería; se siguen produciendo fugas de agua; el padrón continúa bajando...
El cargo nace con una misión clara: explicar por qué las cosas no salen y hacerlo, además, con creatividad, constancia y cierta elegancia retórica.
La novedad de esta puesto es que se mantendrá a pesar de los cambios de gobierno, ya que las excusas pueden ser incluso las mismas con el paso de los años y "si alguien ya tiene experiencia es tontería cambiarlo", han manifestado en el pleno.
Según fuentes municipales, la decisión responde a la necesidad de centralizar y profesionalizar un trabajo que hasta ahora recaía de forma dispersa en distintas áreas. “Había demasiadas versiones para un mismo retraso”, reconocen. “Con esta concejalía, la excusa será única, oficial y perfectamente argumentada”.
El perfil del cargo exige experiencia en ruedas de prensa, dominio del condicional (“se habría hecho”), manejo fluido del gerundio administrativo y capacidad para usar frases comodín como “es más complejo de lo que parece” o “viene de lejos”.
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