A pesar de que solemos olvidarnos de ellos, en los ojos es donde primero se refleja el envejecimiento de los seres humanos. Últimamente, muchos pacientes se están fijando en ello y por eso apuestan por realizarse una blefaroplastia con o sin cirugía. ¿Cuáles son las claves de este procedimiento, y qué debes considerar si te vas a someter a un proceso de rejuvenecimiento?
Esta intervención, por parte de profesionales como los de la Clínica Iradia, permite recuperar el estado original de los párpados logrando que se parezcan a los de los más jóvenes.- Para ello, la cirugía de párpados es una de las técnicas más comunes que existen. Pero no la única, ya que también hay situaciones en las que es suficiente con llevar adelante un tratamiento sin cirugías.
Al acudir a los expertos en blefaroplastia en Valencia, ellos primero analizarán cuál es tu condición de la piel en torno de los ojos. Básicamente, estas intervenciones tienen como objetivo el reducir el exceso de piel y grasa que se acumula en toda esa zona.
Para quienes no están acostumbrados a esta clase de cirugías, una blefaroplastia es una intervención quirúrgica que tiene como objetivo reducir el exceso de piel y/o grasa -tanto en los párpados superiores como en los párpados inferiores-. Dichas cirugías pueden demorarse unos pocos minutos o un par de horas, lo que depende del paciente y del método empleado para operar.
Lo ideal es recurrir a quienes llevan largos años aplicando esta técnica de rejuvenecimiento de la mirada, ya que no hay nadie mejor preparado para eliminar las bolsas y las ojeras. Por supuesto, también se borran los párpados caídos. Eso consigue una mirada mucho más natural y joven, lo que cambia la apariencia completa de todo el rostro. Pide una cita cuanto antes para operarte.
Corregir los signos del envejecimiento desde que éstos empiezan a notarse es clave para evitar que se vuelvan tan evidentes. Gracias a los cirujanos oftalmólogos especializados en blefaroplastia tus ojos parecerán más despiertos, y tú más activo/a. Adicionalmente, puede suponer el disfrutar de un mayor campo de visión. Y esto mejora la calidad de vida en general.
Por otro lado, la blefaroplastia sin cirugía es un tratamiento poco invasivo, incluso preventivo, que tiene múltiples ventajas en comparación con la intervención quirúrgica. Esta técnica alternativa disminuye la caída de la piel del párpado superior, elevando rápidamente las cejas y reduciendo las ojeras y las bolsas oculares. Es una solución para evitar pasar por la intervención invasiva.
Casi siempre consiste en la infiltración de ácido hialurónico, intentando acabar con las ojeras ubicadas en la zona periocular. Previamente a tratarlas, se debe hacer un diagnóstico correcto para evitar que el surco lagrimal se marque más de lo deseado.
Cuando quieras rejuvenecer tu mirada, ponte en contacto con la Clínica Iradia para obtener un turno y verte como hace años.
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