Purifica tu esencia: consejos para limpiar tu alma y encontrar la paz interior

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Sanar el cuerpo pasa por sanar el alma. Y viceversa. Este proceso es algo que llevan demostrando, desde hace miles de años, las culturas más antiguas de nuestro planeta. La búsqueda de la paz interior es el objetivo vital que hay que marcarse, sobre todo en estos momentos en los que el ruido exterior es tan ensordecedor.


Tanto en la India como en Japón o incluso en las zonas más perdidas de América se han utilizado, generación a generación, distintos tipos de recursos para lograr esa purificación de la esencia del ser. Así lo explican en sinchisinchi, una web especializada en el rapé, una medicina natural del Amazonas, y en otras sustancias sagradas para vaciar la mente y conectar con el verdadero yo.


«El uso del rapé se remonta hasta el pasado más remoto», detallan estos especialistas: «Se trata de un polvo hecho con distintas plantas, entre las que se encuentra el tabaco, que ayuda a limpiar la glándula pineal, sanando al hombre y a la mujer tanto en cuerpo como en alma».


Esta tradición, que cada vez es seguida por más personas, ha demostrado su eficiencia a través del tiempo. Y es que el uso de plantas con objetivos medicinales no es nada nuevo: «En España tradicionalmente se ha usado la tila como calmante y en otros lugares del mundo se han descubierto otras utilidades de las plantas autóctonas, algunas con mayor efecto en nuestro organismo», concluyen.


Sintonizar con el yo interior gracias al rapé


La glándula pineal es la forma de denominar a una parte muy pequeña de nuestro cerebro. Es la encargada de regular los ciclos de sueño y secretar melatonina, con lo cual es clave para tener un organismo descansado; además está muy relacionada con otras funciones del sistema nervioso central.


Según la tradición amazónica, la exposición a sustancias como el flúor hacen que esta glándula se adormezca. La mezcla de plantas del rapé sirven para limpiar la pineal y devolver a esta glándula a su estado más óptimo, generando una sensación de bienestar y permitiendo que el usuario tenga la mente más abierta para conectar consigo mismo.


Las conclusiones de este proceso son las siguientes: liberar la mente y trabajar de manera consciente e inconsciente en las enfermedades físicas, emocionales y espirituales del cuerpo.


El consumo de rapé


La forma más habitual de consumo del rapé es con inhalación por la nariz. Generalmente, el ritual se hace entre dos personas: una es la que recibe la planta sagrada, mientras que el otro actúa como protector y es quien sopla la mezcla a través de una caña de bambú en forma de pipa.

Hacerlo en un ambiente relajado, en compañía de personas con más experiencia, es la mejor fórmula para obtener beneficios inmediatos en un entorno de seguridad.


Otras hierbas sagradas


El rapé amazónico es solo una de las hierbas sagradas que las tribus repartidas por todo el planeta han usado desde tiempos inmemoriales.


Cada zona del mundo cuenta con una receta de rapé, que se realiza mezclando el tabaco con plantas autóctonas de la zona.


Así, se puede encontrar Katukina de cactus o de nisrual, Yawanawá o Nukini, que no son otra cosa de diversas mezclas que buscan purificar la esencia de la persona, a la vez que aportar otros beneficios extra como fortalecer el trabajo espiritual, disipar el cansancio o ayudar en casos de dolor o fiebre.


Lo interesante es contactar con especialistas en el uso de estos polvos rituales antes de adquirirlos para comenzar a explorar en el autoconocimiento y la sanación espiritual. Estos profesionales son quienes más capacitados están para orientar a quien desea iniciarse en este tipo de prácticas. 


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