Reunificar las deudas no es la solución

En el momento en que nos vemos superados por las deudas y no sabemos muy bien que hacer, es sencillo tomar decisiones equivocados. Lo mejor que podemos hacer en estas situaciones en recurrir al asesoramiento por parte de profesionales, tanto para que nos informes de las salidas que hay para el problema como para ponerlas en marcha.

La reunificación de deudas una de las opciones más populares

Una de las opciones a las que se recurre es la reunificación de deudas. Básicamente, lo que hace la gente es negociar con bancos y entidades financieras juntando todos sus préstamos y demás créditos en un solo pago a fin de reducir la cuota mensual que pagan. Para lograrlo hipotecan su caso con los riesgos que ello tiene.

Esta es una solución a corto plazo, puesto que, aunque mes a mes verás como irás más desahogado, no debemos olvidarnos de los intereses que tiene esta hipoteca. Aunque te parezcan bajos estos intereses, la deuda va aumentando. Más tiempo que mantienes la deuda, mayor tiempo con dichos intereses. No olvidemos de que si por el motivo que sea dejas de pagar la cuota, vas a perder tu vivienda.

En caso de que carezcas de ingresos suficientes para pagar la hipoteca, no es sencillo sobrevivir sin una vivienda propia, pues los alquileres no son siempre económicos y menos cuando una familia depende de ellos.

Todo esto hace que sea mejor buscar alternativas a este sistema, aunque muchos no sean conscientes de que existen.

La Ley de la Segunda Oportunidad, una alternativa

Otra interesante opción es la Ley de la Segunda Oportunidad. Más concretamente se denomina Ley 25/2015 y está pensada para que la utilicen todos los particulares y trabajadores por cuenta propia que han acabado con mayor número de deudas de las que pueden pagar en ese instante.

Se comienza con el Acuerdo Extrajudicial de Pagos que es vital, puesto que cuando no se llega a un acuerdo, es fundamental para las decisiones que tome el juez a posteriori.

Lo que se pretende es que deudor y acreedores lleguen a un acuerdo entre ambas partes para liquidar la deuda de forma beneficiosa para los dos. El deudor tendrá que solicitar la ayuda de un abogado como mediador concursal. Aquí, como nos comentan abogados valencia es importante confiar en profesionales de experiencia y buena reputación.

La persona con deudas puede ofertar a los acreedores el pago cediendo determinados bienes, pero es algo que no es obligatorio. Existe la opción de fraccionar la deuda, pudiendo devolverla en pequeños pagos que permitan que subsistencia del deudor y que en menos de una década el acreedor consiga el dinero.

De no llegar a un acuerdo porque tampoco sea imposible, el mediador concursal, solicitará al juez un concurso de acreedor, siendo en esta fase un administrador concursal.

En esta situación, el juez lo que hace es evaluar la situación de cada una de las deudas que existen y exonera al deudor de ellas según una serie de requisitos.

Este sistema permite que mucha gente con problemas económicos pueda comenzar de cero. Desde aquí te recomendamos que si tienes problemas y necesitas acudir a un profesional para que te ayude con tus deudas o te informe de todo el proceso, contactes con un abogado para asesorarte.