Algunos beneficios contrastados del cannabis para la salud

El uso recreativo del cannabis es muy polémico a día de hoy; sin embargo, está comprobado que puede ayudar en el ámbito médico con el tratamiento de ciertos trastornos.

Hay todo un mundo en el cultivo de cannabis, ya que son muchos países los que ya han legalizado la marihuana. Incluso hasta es posible tener cultivos propios en armarios especiales, haciéndonos con semillas diferentes, como las semillas Dinafem (semillas feminizadas de marihuana de gran calidad).

El cannabis integra dos sustancias químicas activas que, según han concluido los investigadores, pueden ser utilizadas para el ámbito médico. El CBD (siglas que hacen referencia al cannabidiol), ayuda a mejorar determinadas situaciones del cerebro y el THC (Siglas del Tetrahidrocannabinol) que contribuye a eliminar el dolor.

En las siguientes líneas vamos a detallar algunos de los principales beneficios medicinales del cannabis.

Beneficios del cannabis en el ámbito médico

Tratamiento del glaucoma

El cannabis puede ser utilizado como tratamiento y prevención del glaucoma ocular. Estamos hablando de un tipo de trastorno que afecta a los globos oculares, incrementando la presión de la zona, afectando al nervio óptico y causando diferentes daños en la vista.

El papel del cannabis en este sentido es el de reducir la presión en el ojo.

Además, también impide que la enfermedad se extienda, previniendo que el paciente se pueda quedar ciego.

Control de crisis epilépticas

Un estudio que apareció publicado en la revista Journal Of The American Association determinó que el cannabis también podría usarse para controlar las crisis epilépticas.

Esto sería posible gracias a los ingredientes activos de la marihuana que ya hemos comentado anteriormente, en especial del THC. Al parecer, estos compuestos tendrían el papel de controlar las convulsiones uniendo las células cerebrales, que son las responsables de controlar la excitación y de regular los niveles de excitación.

Evita que el cáncer de propague

Investigadores del California Pacific Medical Center (San Francisco), determinaron que el CBD contribuye a evitar que ciertos tipos de cáncer se puedan llegar a extender.

En resumidas cuentas, el componente cannabidiol podría desactivar un gel conocido como Id-1, lo que le pondría las cosas difíciles al cáncer para que se pudiera extender.

Además, el cannabis contribuye a aliviar el dolor y a controlar las náuseas. Es por ello, por lo que se utiliza el cannabis como una fórmula para aliviar los efectos secundarios que produce la quimioterapia.

Actúa contra la ansiedad

Investigadores de la Facultad de Medicina de Harvard concluyeron que el cannabis podría mejorar la ansiedad reducida, mejorando al mismo tiempo el estado del ánimo. Incluso hasta podría utilizarse como sedante si la dosis que se aplica es baja.

Ahora bien, hay que tener cuidado con esto: si se aplica en dosis altas, podría incrementarse la ansiedad y hacer que el consumidor desarrolle paranoia.

Ralentiza la extensión el Alzheimer

Además, científicos del Scripps Research Institute declaran que el cannabis también tendría un papel activo a la hora de frenar la progresión de la enfermedad del Alzheimer.